La fasciopatía plantar, más conocida por la población como “fascitis plantar”, es una patología que se caracteriza por dolor en la planta del pie o en la región del talón. El dolor normalmente es peor por las mañanas en los primeros pasos o tras periodos largos sin caminar.
En esta patología se produce un aumento en la sintomatología cuando se incrementa la actividad física o al finalizar el día. Asimismo, suele aumentar con el paso del tiempo si no es tratada correctamente y hay altas probabilidades también que aparezca en el otro pie (Pollack et al. 2017).
Estudios como el de Z. Al-Boloushi et al. 2018 nos hablan de una alta prevalencia de esta lesión, ya que aparecerá en un 10% de la población a lo largo de su vida.
Hay estudios que nos hablan de los factores de riesgo asociados a esta patología (Bhatty et al. 2019), como pueden ser:
· Obesidad o aumento de peso en un corto periodo de tiempo.
· Exceso de actividad deportiva o comienzo de actividad deportiva sin una progresión adecuada.
· Tipología de pisada, con pie cavo o plano, pisada pronada o supinada.
· Calzado inadecuado o falta de progresión a su adaptación.
· Longitud del tendón de Aquiles y tríceps sural.
Desde la fisioterapia tenemos un amplio abanico de técnicas que usaremos en función de cada paciente en concreto, para aliviar la sintomatología y para evitar su evolución. Técnicas que ayudarán a que desaparezca esta lesión son las siguientes:
· Terapia manual y punción seca en la musculatura que afecta y cronifica esta patología, mediante el tratamiento de puntos gatillo miofasciales que provocan dolor local y referido y pueden modificar nuestra marcha o nuestra posición estática de carga.
· Ejercicio terapéutico en base a la valoración realizada para dar fuerza a los músculos más débiles y bajar la actividad de los que más trabajan y perpetúan esta patología.
· Educación al paciente, haciéndole entender el porqué de su patología, cómo evitar su evolución y cómo tratarla. En este ámbito será fundamental entender, por parte del paciente, la importancia de la parte pasiva y activa del tratamiento.