¿Qué es la reflexología podal y para que se utiliza?
La reflexología, reflexoterapia o terapia de las zonas reflejas es la práctica de estimular puntos sobre los pies, manos, nariz u orejas (llamados zonas de reflejo), basada en la creencia de que tendría un efecto benéfico sobre otras partes del cuerpo, o de que mejorará la salud en general.
La forma más común es la reflexología del pie. El reflexólogo podal aplica presiones sobre el pie de una persona, el cual presuntamente está dividido en un cierto número de zonas reflejas correspondiendo a todas las partes del cuerpo.
El masaje del pie es un excelente remedio natural empleado desde hace siglos en China y que aporta una singular energía. Los pies constituyen el elemento principal de la reflexología dada su facilidad de acceso a los diferentes puntos de tratamiento y a la sencillez que esto implica al momento de brindar un diagnóstico y prevención de esa enfermedad.
Cada punto preciso del arco plantar corresponde a un punto del cuerpo, así que bastaría dar masaje en los pies para curar o aliviar un punto determinado. Si se desea conseguir el máximo beneficio es importante que se acuda a una sesión podálica al mes para que el tratamiento lo aplique otra persona que este especializado en el tema, ya que si se lo practica de una manera inadecuada podría causar un daño y no un alivio. En el tratamiento sería ideal incluir un bálsamo relajante. Para ello es importante conocer sobre la reflexología.
La reflexología podal es una técnica de masaje específico, que se aplica en ciertas zonas de los pies que se corresponden con otras partes del cuerpo.
Este método permite al organismo estar en las mejores condiciones posibles tanto físicas como mentales para luchar o prevenir los distintos síntomas o dolencias. Es un medio de ayudar a la persona para que utilice al máximo sus propios recursos de curación y para que su energía circule más armoniosamente a través del organismo.
Esta técnica parte de la idea de que los pies representan una imagen esquemática del cuerpo entero y de sus órganos, y a la vez, los considera como fuente de información para entender el desequilibrio energético de la persona que está siendo tratada.
Cada zona de los pies es el reflejo de un órgano del cuerpo, de ahí que mediante el masaje de zonas concretas de los pies se puede influir reflejamente sobre los correspondientes órganos internos.
La reflexología estudia las relaciones y conexiones nerviosas de unas partes del organismo con otras. Es decir, la reflexología podal estudia la conexión nerviosa existente entre determinadas zonas del pie y órganos, glándulas, huesos y músculos. Por tanto, la reflexología "NO CURA", solo impulsa el poder autocurativo del organismo.
Geografía plantar
En los pies hay varias zonas reflejas, por ejemplo: el dedo meñique es la nariz y el corazón, el índice corresponden al ojo y al hígado, la mitad del arco plantar a los riñones, el lado izquierdo del pie izquierdo al corazón, justo bajo el meñique, y el talón al sexo.
Si no se tiene experiencia es difícil acertar en el punto exacto. En el punto seis en la guía para cuidadores, se nombrarán algunos masajes que son muy sencillos y fáciles de realizar.
Beneficios de la reflexología podal
La reflexología podal es un método antiquísimo, del cual sabemos a partir de viejos textos e ilustraciones que los antiguos egipcios, chinos, japoneses, e indúes ya trabajaban sobre el pie para proporcionar buena salud. Al estimular ciertas zonas del pie se pueden obtener efectos en diferentes órganos o zonas del cuerpo. Algunos de los beneficios generales que podemos conseguir con la reflexología podal son:
· Es relajante. Los pies son una zona que frecuentemente olvidamos y maltratamos, por lo que los masajes producen relajación en la zona.
· Reduce el estrés. Alivio del estrés. El masaje ayuda a liberarnos de las tensiones, aflojar las contracturas y ansiedades que se generan con el ajetreo del día a día.
· Mejora la circulación. Se produce una activación de la circulación sanguínea en el cuerpo.
· Equilibra los distintos sistemas. Junto con la activación de la circulación se activa el sistema inmunológico.
· Permite la liberación de toxinas. La apertura de las vías neuronales y circulatorias hacen más efectivos los mecanismos de eliminación y desecho de toxinas de las células.
· El cuerpo, al liberarse de las toxinas, puede encontrar un equilibrio.
· Revitaliza la energía.
· Actúa de forma preventiva.
Reacciones de la reflexología podal entre las sesiones
Por lo general, entre el 2º y la 6º sesión de tratamiento pueden aparecer una serie de reacciones específicas en cada paciente. Estas reacciones aparecen como señal del efecto del tratamiento, y por lo tanto el especialista debe tener conocimiento de ellas.
Su desaparición se lleva a cabo aplicando una técnica de masaje más suave, o simplemente dejando un intervalo de tiempo mayor entre ambas sesiones.
Las reacciones más típicas son;
· Aumento de la cantidad de orina, que puede ser de olor fuerte.
· Aumento de la frecuencia y del volumen de las deposiciones.
· Aumento de la sudoración. Pueden aparecer hasta erupciones.
· Aumento de las secreciones de nariz, garganta y bronquios.
· Aumento de la secreción y de la acidez de las secreciones vaginales.
· Disminución de la fatiga.
· Puede aparecer fiebre después de una sesión de reflexología. Esto es un síntoma de curación.
· Puede haber reactivación de enfermedades crónicas como amigdalitis, sinusitis, focos dentarios…
· Reacciones psíquicas que van desde la relajación hasta la inquietud emocional.
Dolencias en las que te puede ayudar la reflexología podal
Con el masaje se evocan las facultades curativas que se encuentran «dormidas» en el cuerpo. Es decir, la reflexología podal favorece que el propio cuerpo se equilibre, restableciendo la armonía en todos los procesos (tanto físicos como mentales y emocionales). Con la reflexología podal se produce un aumento de energía, que disipa las emociones y establece la paz. Algunas de las patologías o dolencias que se tratan con la reflexología podal son:
· Dolor de espalda, de cabeza (incluidas las migrañas), de tórax y de cuello
· Estreñimientos y gastritis
· Dolores menstruales en la mujer
· Diabetes mellitus
· Alteraciones respiratorias, como el asma
· Lesiones articulares como luxación, esguince, contusión..
· Lesiones musculares como agujetas, contracturas, elongaciones…
· Desequilibrios en el sueño y el estado de ánimo .
Diferentes problemas según la morfología y estructura de nuestros pies
Según la reflexología podal, la forma en la que se encuentre nuestro pie vamos a encontrar influencias en nuestro cuerpo. Por ejemplo:
· El pie plano influye de forma negativa a nivel de la columna vertebral.
· El pie cavo tiene consecuencias para los órganos de la respiración, hígado, vesícula biliar, corazón y articulaciones de los hombros.
· El pie valgo o varo y la deformación del calcáneo junto al astrágalo, llevan a trastornos de los órganos del abdomen y pelvis, sobre todo del intestino.
· El hallux valgus, tiene consecuencias reflejas negativas en la zona cervical, tiroides y corazón.
· Deformaciones de los dedos del pie, como los dedos en garra o en martillo, tienen influencia refleja sobre los órganos de la cabeza.
· Igualmente los enrojecimientos, durezas, callos, verrugas, sabañones, etc., en las zonas reflejas de los pies, influyen a nivel reflejo sobre los órganos correspondientes.
Si sufre de algunos de estos problemas, póngase en contacto con un profesional y evita tener que pasar por posteriores consecuencias aún peores, en nuestra clínica del pie nos ponemos a disposición para realizar cualquier servicio de podología.
Contraindicaciones de la reflexología podal
· Procesos agudos de fiebre, trastornos de conocimiento, dolores fuertes y hemorragias.
· Cáncer en los pies. Pacientes con cáncer, sobre todo en caso de metástasis.
· Enfermedades que requieren intervención quirúrgica.
· Gangrenas en los pies.
· Embarazo con riesgo o amenaza de aborto.
· Quemaduras, heridas, hematomas, esguinces en los pies.
· Micosis extensas.
· Flebitis o lingangitis.
· Enfermedades infecciosas agudas.
· Trombosis venosa profunda.
· Enfermedades agudas o crónicas.
· Durante la menstruación en la mujer, no actuar sobre el aparato genital.
· Durante el embarazo, sobre todo en caso de peligro de abortos o parto prematuro o incluso en embarazadas con antecedentes de los mismos.
· Enfermedades infecciosas que cursan con un estado febril elevado, dolores fuertes, espasmos, hemorragias.
· En diabetes, si se inyecta insulina, se ha de llevar un control de glucosa (bajo control médico) por la posibilidad de oscilaciones en el nivel de glucosa en sangre.
· Personas débiles, edades avanzadas y pacientes que acaban de superar una enfermedad o intervención quirúrgica grave.
· En caso de hongos (pie de atleta, micosis), heridas, llagas o cualquier tipo de erupción en los pies.
· En caso de callosidades, no presionaremos hasta que se hayan eliminado, la presión sobre estas zonas son muy dolorosas.
· Inflamación del sistema venoso o linfático (trombosis, flebitis, etc.)
Terapia de las zonas reflejas de los pies (TZR)
Con la Reflexoterapia Podal se produce el intercambio de fluido necesario para mantener nuestra armonía, desbloqueando y desentumeciendo los pies, activando la circulación sanguínea y linfática.
Liberando la tensiones acumuladas en la terminaciones nerviosas, las contracturas musculares, y al mismo tiempo limando sus asperezas de un modo natural, además de renovar nuestra energía vital.
Mediante el masaje todas las sustancias de desecho van siendo progresivamente reducidas a partículas más pequeñas, de tal forma que pueden ser recogidas por los capilares, y, según el caso, incorporarlos al fluido sanguíneo o linfático.
También puede tratarse de nutrientes o principios activos que se encuentran retenidos, pero que son necesarios para realizar funciones vitales, pero que si permanecen acumulados en los pies no pueden ser utilizados por el cuerpo. A través del masaje se mejora la redistribución de estas sustancias a todo el organismo.
La Reflexoterapia Podal es una terapia natural que puede ayudar al tratamiento de ciertas enfermedades por medio de masajes en determinados puntos de los pies o en las manos, con el fin de estimular capacidades curativas del organismo.
La Reflexoterapia Podal estimula la transmisión nerviosa, debido a la limpieza de las toxinas y residuos catabólicos y metabólicos, quedando liberada la red periférica de los tejidos.
La información procedente de nuestros pies entra en el sistema nervioso central, a la altura de la zona lumbar sacra. De igual forma, se transmiten las órdenes procedentes de centros superiores con destino a nuestros pies, pero si existen bloqueos la interconexión queda truncada, produciéndose dificultades en el equilibrio eléctrico del cuerpo, lo que conlleva un desajuste bioquímico de nuestro medio interno y externo.
Recomendaciones y observaciones que hacemos a nuestros pacientes de reflexología podal:
Al realizar un tratamiento de reflexología podal recomendamos:
Evitar el café y las sustancias estimulantes unas horas antes de la sesión.
Evitar tener el estómago demasiado lleno y evitar acudir en ayunas a la sesión.
Beber abundante agua mineral después de la sesión y durante las 24 horas posteriores.
Tomarse un descanso después de la sesión.
Después de un tratamiento en el centro de reflexoterapia es posible notar más cansancio, lo cual se debe a que el organismo está gestionando el estímulo recibido, siendo, en consecuencia, una reacción normal.
Igualmente, es posible que aumente el número de micciones, deposiciones u otras sustancias, y que haya un cambio en las características de estas (color, olor…), debido a una posible eliminación de tóxicos y/o una regulación del propio sistema.
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